Mérida, Yucatán, 11 de junio del 2022.- Los usuarios de la Junta de Agua Potable de Yucatán (JAPAY) son exigentes porque el 80% paga el servicio, pero también obliga a eficientar el servicio, de tal modo que este concepto de eficiencia subió 11 puntos en esta administración, pues pasó de 25% a 36%, afirmó su director Sergio Chan Lugo.

De hecho, el 80% de los usuarios pagan por el servicio, que es un nivel muy alto si se compara con otras entidades del país, y más aún si ahora estamos viendo que en Nuevo León la gente está sufriendo por la falta del agua y por la regulación del fluido que obliga una enorme carencia.

Por eso hay que valorar lo que tenemos en Yucatán, cuidar este recurso natural, que a otros les hace falta, dijo durante una entrevista radiofónica.

Chan Lugo comentó que el principal reto de la Japay es atender las quejas por el servicio y las necesidades de los usuarios de manera particular, que a veces se trata de falta de mantenimiento de las tuberías que se tupen, pero también hay otro reto que es el crecimiento de la zona metropolitana con tantos desarrollos inmobiliarios que se están dando en Umán, Kanasín, Ucú, Conkal y hasta Progreso.

«Si bien son municipios cercanos a la capital, también tienen “impacto” en la presión del agua que suministra la Japay», dijo.

En este contexto, el funcionario dijo que uno de los proyectos que está aplicando es la tecnología para mejorar la eficiencia física, a través de la telemetría aplicada a los cárcamos y a las plantas de extracción de agua.

Esto significa que la Japay puede saber dónde hay fallas y cuándo puede bajar la presión o subirla según las necesidades, qué motor atender y cómo hacerlo desde un punto lejano y en caso que se requiera, se acuda para hacerlo personalmente en cada cárcamo.

«En el 2018 empezó la modernización, pues se tenía el 25% de eficiencia física, es decir que de cada 100 litros se facturaba 25%, que se debía atender de manera urgente por el crecimiento población y la falta de mantenimiento, ahora ya llegó a 36%, lo que es positivo».

Chan Lugo dijo que la telemetría se aplica en todos lados, pero en este momento se utiliza para optimizar el servicio, con el respaldo de los propios trabajadores y de la Universidad Tecnológica Metropolitana. La tecnológica se aplica en los 10 cárcamos y los tres plantas y la zona del fraccionamiento Las Américas, que allí cuando falla la energía eléctrica no hay agua, pero con el sistema automatizado ahora se atienden en menor tiempo o de manera inmediata, a veces, sin que se den cuenta los usuarios.

«La eficiencia física de atención del agua hacia los hogares es del 36% actualmente, pero tenemos la meta de llegar a 76%, lo que abarata los tiempos y mejora la eficiencia», dijo Chan Lugo.

Expuso que por el crecimiento urbano el reto es atender la demanda anual de 10 mil viviendas al año, pues el agua no es un recurso infinito, sino hay que cuidarlo.

El crecimiento que se esperaba para el 2020 ya fue rebasado, y lo previsto para el 2030 también, pues se esperaba un millón 100 mil pero es número de población ya está ahora, de modo que el crecimiento población no rebasó 10 años y ese es el reto, subrayo. 

Toda la aplicación de la modernización, con el caso de la telemetría, es para atender las necesidades de ahora pero también estamos pensando en el futuro, dijo.