Celestún, Yucatán; 10 de junio de 2022 (ACOM).- Un problema añejo territorial volvió a resurgir esta mañana en los límites de Celestún (Yucatán) con el vecino estado de Campeche, esto debido a que la franja divisoria ubicada al sur de este municipio costero se ubican varias charcas salineras, donde de acuerdo a las autoridades campechanas, les pertenecen.
Y aseguran que desde hace varios años los del puerto yucateco han estado «cosechado» sal ilegalmente, por lo que esta mañana acudieron en Convoy con apoyo de la Guardia Nacional.
Sin embargo extraoficialmente se supo que para poder explotar estas charcas se requiere de un permiso oficial en Calkiní, Campeche, lo cual un empresario pesquero celestunense ha conseguido, y empleado a vecinos en su mayoría de la comisaría del vecino estado.
Con ayuda de la Guardia Nacional y de la Policía Estatal de esa entidad ingresaron por tierra yucateca, y los agentes fuertemente armados procedieron a detener a dos personas del puerto que estaban en dicho sitio, presuntamente al no contar con su permiso fueron puestas a disposición de las instancias correspondientes. Se ignora, si ya fueron puestos en libertad.
Por otra parte, los pobladores lamentaron que algunos celestunenses apoya ron este operativo, pero lo que más les molesto fue que el alcalde local José Ramírez Perera, no se haya pronunciado al respecto del hecho, donde irrumpen en la soberanía de Celestún.
Y tampoco el gobierno estatal, ha emitido un comunicado al respecto acerca del tema.
Cabe señalar que el pasado fin de semana, la gobernadora campechana Layda Sansores, por vez primera acudió en un acto oficial visitar Isla Arenas, del municipio de Calkiní. Seguidamente en lanchas arribaron hasta el punto de Real de Salinas, cuyas charcas son anexas a este mencionado sitio.
Por último, una mujer del puerto D.S.C., opinó que «la mojonera del territorio de Celestún es hasta Yaltón, y ningún presidente tenía derecho a dárselo a Campeche, hay que reclamar nuestro territorio porque nos pertenece hasta más de la isla», finalizó (sic.)
