En un extraño hecho ocurrido durante la noche y madrugada de ayer y hoy, se realizó un ritual aproximadamente a dos kilómetros de la hacienda San Pedro Holactún en Seyé.

El área se llenó de escalofriantes gritos, bailes y gente desnuda encapuchada, creando una escena inquietante.

Según las investigaciones preliminares, los ruidos comenzaron poco después de la medianoche. Los residentes de los alrededores dijeron que se escuchaban llantos parecidos a los de un bebé y el sonido de un niño golpeado.

Los gritos de los adultos y el golpeteo de los pies siguieron a estos sonidos angustiosos, como si los adultos estuvieran bailando.

Los transeúntes en la carretera cercana se sorprendieron cuando se toparon con esta vista extraordinaria. Figuras encapuchadas, algunas de ellas sin ropa, bailaban alrededor de una estrella pintada en el suelo. El ambiente se vio acentuado por la presencia de velas encendidas y luces de vigilia, que se podían ver desde la distancia. Perplejos y perturbados, los testigos decidieron retirarse.

La policía municipal acudió al lugar, pero debido a la abrumadora cantidad de personas involucradas en el ritual, se abstuvieron de intervenir. Según la Policía Estatal, nunca llegaron al lugar.

Al despuntar el alba, se descubrió pintada en el suelo una estrella. Junto a ella, se encontró una muñeca perforada con un picahielo y una máscara facial que contenía una flor amarilla. Estos objetos fueron rápidamente eliminados del sitio.

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Actualmente, no se ha publicado información oficial sobre este incidente. La naturaleza y el propósito del ritual siguen siendo desconocidos. Se espera que las autoridades lleven a cabo una investigación exhaustiva para arrojar luz sobre este hecho inquietante.

ACOM