En plena veda electoral, las oficinas del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) entregaron apoyos para beneficiar al alcalde y candidato por Opichén, Sandy Calan Ordoñez.
En días pasados algunos empleados de la dependencia federal miraron con asombro el tránsito de decenas de personas del pueblo maya a esas instalaciones.
El pasado 4 y 5 de abril, al menos, una docena de personas, mayoritariamente mujeres, asistieron a solicitar que se les apruebe un proyecto para su comunidad.
El grupo estuvo encabezado por el propio Calan Ordoñez y un par de sus colaboradores cercanos quienes entraron y salieron de las oficinas del INPI con documentos oficiales.
Señalado por su pobre gestión, conflictos con los ejidatarios y abuso de poder, el alcalde con la aspiración de reelegirse busca apoyo de liderazgos del Partido Verde Ecologista de México (PVEM).
Entre ellos está Miguel Canul López, jefe del centro para los pueblos indígenas del INPI, con sede en Maxcanú.
El funcionario también es operador del PVEM en algunos municipios del interior del estado y hace trabajo político con el visto bueno del delegado del INPI, Domitilo Carballo Cámara.
Habitantes de la comisaría de Calcehtok denunciaron que varias camionetas estuvieron en el municipio por varias horas el pasado 4 de abril.
Ese día, en las oficinas del INPI en Maxcanú, personal se encargó de los preparativos de la asamblea en la comunidad a la que Calan Ordoñez.
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El alcalde y, a la vez candidato, es acusado por la estructura del equipo de Joaquín Díaz Mena de negarse a trabajar juntos.
En vez de ello, prefiere el apoyo de Miguel Canul López quien, hasta hace un par de semanas, era operador cercano de Liborio Vidal Aguilar.
ACOM
