En el marco del anuncio de la mesa redonda «El futuro de Mérida», que se celebrará mañana en la Biblioteca José Martí del Parque de Las Américas, el cronista de la ciudad, Gonzalo Navarrete Muñoz, y el arquitecto urbanista Antonio Peniche Gallareta, subrayaron los retos urbanísticos actuales que enfrenta la capital yucateca en el contexto de su 483 aniversario, sugiriendo una legislación más punitiva y la adaptación de tecnologías como la IA.
Durante la conferencia de prensa, Navarrete advirtió sobre el riesgo de destrucción de Mérida debido al crecimiento desordenado, enfatizando que «el que dañe a la ciudad tiene que pagar con cárcel», como sucede en Londres, donde se encarcela hasta por 50 años a quien afecte la ciudad, al tiempo que abogó por endurecer la legislación urbana.
El cronista destacó que la construcción de edificios altos sin las medidas de seguridad necesarias pone en peligro a la población, señalando que no existe un equipo de bomberos adecuado ni sistemas de protección civil para atender emergencias en estas edificaciones. Además, cuestionó si las estructuras están diseñadas para soportar ciclones, dada la vulnerabilidad de la región.
Según Navarrete, Mérida enfrenta un panorama «turbulento» por la permisividad legal que favorece a desarrolladores con influencia económica, lo que amenaza con convertirla en una ciudad para pocos, mientras se desplaza a los habitantes originales. Los setenta, dijo, fue una década de crecimiento importante de la ciudad, con la construcción del anillo periférico, circuito colonias y la pavimentación del sur de la ciudad. En esa época la ciudad creció, pero ahora parece que vamos hacia un decrecimiento y daño.
Falta regulación en desarrollo urbano
Por su parte, Peniche Gallareta expuso la falta de normativas claras en torno a la redensificación y el crecimiento vertical de la ciudad. Argumentó que la proliferación de edificaciones en zonas sin planificación adecuada ha generado saturación vial, problemas de drenaje y presión sobre los servicios públicos. Además, señaló que, aunque se han modernizado algunos sistemas de transporte, como el programa Va y Ven, aún no son suficientes para soportar el aumento poblacional en ciertas áreas.
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Ambos coincidieron en la necesidad de actualizar los reglamentos de construcción y los programas de desarrollo urbano para delimitar claramente las zonas aptas para proyectos verticales y densificación. Navarrete insistió en que se deben imponer sanciones ejemplares para quienes incumplan estas normas, mencionando ejemplos de ciudades europeas donde las infracciones urbanísticas son castigadas con prisión.
Gentrificación desplaza a comunidades vulnerables
La gentrificación fue otro punto clave del debate. Peniche destacó que los cambios en el valor inmobiliario, especialmente en zonas como el Parque de La Plancha, han expulsado a habitantes de bajos ingresos, lo que representa un reto social significativo.
Ambos expertos hicieron un llamado a las autoridades, al sector privado y a la ciudadanía para trabajar conjuntamente en la implementación de políticas públicas que equilibren el desarrollo con la preservación del patrimonio urbano y la calidad de vida.
Dijeron que esto solo fue un adelanto de lo que será la mesa redonda programa a las 7 de la noche, y que promete profundizar en estas temáticas y proponer soluciones innovadoras y sostenibles para Mérida, una ciudad que enfrenta importantes retos en su transición hacia el futuro, como la inteligencia artificial.
En la mesa redonda de mañana participarán destacados especialistas como Luis Ojeda, restaurador del INAH; Elvia González Canto, experta en arquitectura urbana del siglo XX, además de Antonio Peniche Gallareta y Gonzalo Navarrete Muñoz.
ACOM
