Baca, Yucatán; 15 de abril de 2022 (ACOM).- Los intensos rayos del sol no fueron impedimento para que cientos de personas se dieran cita en el centro de esta población para presenciar la representación 44 de la Pasión de Cristo.

Ataviados con gorras, sombrillas e incluso toallas, las y los feligreses salieron al centro de esta población para asistir a las últimas horas del hijo de Dios.

Desde su palacio, el Tetrarca de Galilea Herodes, pidió a Jesús -interpretado por Alfredo Morcillo- resucitar a su abuelo David y convertir la piedra en pan y el agua en vino, peticiones que al ser incumplidas, desataron la furia del gobernante.

Posteriormente, el mesías fue enjuiciado por Poncio Pilato, quien lo cuestionó y mandó castigar con los soldados romanos, quienes le azotaron y colocaron su corona de espinas, su manto y su cetro. Al final Pilato se lavó las manos y mandó a Jesús a la cruz. 

Con una sensación térmica de 39 grados los organizadores se dieron a la tarea de hidratar en todo momento a Jesús y varios de los personajes, ya que el sol estaba implacable.

En su recorrido la virgen María, bañada en llanto, pidió que por favor soltaran a su hijo, “¿Qué daño les ha hecho?”, exclamó. Como marca la tradición, Simón de Cirene fue el único que acudió en ayuda de Jesús, cargando en varias ocasiones la cruz.  

De igual forma, Verónica limpió la cara del hijo de Dios con un manto y por un milagro de Jesús quedó plasmada su imagen, “¡Es un milagro, es un milagro!” gritaba.   

Jesús llegó cargando su cruz hasta el Monte Calvario, ubicado en el atrio de la iglesia de la Purísima Concepción, en donde fue crucificado junto con el buen y mal ladrón, Dimas y Gestas. Hoy por la noche, después de la misa de las 8:00 se realizará tradicional  marcha del silencio.